DIARIO DEL HUILA dialogó con Roque González Garzón, rector de la Corporación Universitaria del Huila (Corhuila), quien manifestó que las peticiones del naciente sindicato que se creó en esa institución tienen un costo de 1300 millones de pesos, además de que son desmedidas y la gran mayoría están contempladas en las normas.
Una de las peticiones del sindicato es que ellos quieren tener voz y voto en las decisiones que se tomen. Realmente, ¿ellos tienen esa desventaja como sindicato?
En otras palabras, esta responsabilidad es de los docentes…
¿Hay alguna incomodidad por parte de la rectoría en que exista representación?
Por el contrario, fui yo el que coloqué eso en el estatuto nuevo; por el contrario, que vengan. Lo que molesta es que pidan dos representantes del sindicato en el pliego de peticiones y vuelvo a decir: ¿por qué no pelearon durante 22 años esa representación?
¿A la rectoría le incomoda que exista un sindicato?
A mí no me preocupa. Por el contrario, en los estatutos actuales que fueron aprobados por el Ministerio de Educación Nacional en diciembre 17 de 2014 y entraron a regir en Corhuila en enero 20, está contemplado eso. Lo que me preocupa es como no reclamaron durante 22 años, por qué no lo hicieron cuando se estaba violentando un estatuto, cuando había una norma que obligaba a las instituciones a cumplir la ley.
¿Es ilegal que lo estén haciendo ahora?
No lo es, pero por qué no pelearon durante todo el tiempo esa representación. Ahora hay unos procedimientos para llegar a eso, no podemos llegar en este momento a decir que nombremos a dos representantes del sindicato, son representantes de la comunidad dice la ley, no de los sindicatos; si yo nombrara a dos representantes del sindicato en el consejo superior eso sí sería ilegal. Lo que no es ilegal es tener representación y con eso nosotros estamos comprometidos mediante un proceso electoral que va a ser en el mes de septiembre.
Ellos están inconformes con algunas cosas y no quieren aceptar algunas posiciones de la universidad…
Ellos plantearon mediante un pliego de peticiones y en él había una negociación que lógicamente que las cosas que están planteadas en la norma no se pueden cumplir.
El sindicato expresaba que quería que se les diera cuenta de los estados financieros de la institución, ¿cómo solucionar esta situación?
En la página de la institución están los balances y los estados financieros son públicos, reposan en el Ministerio de Educación Nacional, nosotros estamos obligados a enviarlos al Ministerio y cualquiera puede pedirlos, en la página de la institución están los estados financieros.
Desde el sindicato expresaron que hay cierto descontento en la creación de este, ¿eso es cierto?
Eso no es verdad. Si eso fuera cierto la directriz iría desde la rectoría. El hecho de que yo le diga a usted que cumpla un horario de clases, ¿eso es una traba?, lo que no podemos ampararnos en un sindicato es a irregularidades académicas.
Otra de las situaciones que no agrada al sindicato es la exclusividad docente. Según ellos en el nuevo estatuto les piden eso y no cuentan con la remuneración económica suficiente para justificar esa exclusividad.
En cualquier organización hay unos horarios de trabajo que son los que se consideran que son los que deben y pueden trabajar los empleados y para eso les pagan, para que trabajen en un horario que también les permita descansar. La actividad académica es una actividad que demanda preparación de clases, demanda actividades extracurriculares, si salgo de mis clases a la universidad a las 12 del día y me voy a dictar clases a qué horas descanso, es muy difícil por eso se exige que se le dedique el tiempo a la institución y para eso les estamos pagando. El sueldo nuestro es mejor al de la mayoría de las instituciones del Huila y el país.
En total las peticiones que hicieron en el pliego fueron 22 y solo se les aprobaron 2, ¿por qué?
Un pliego de peticiones soporta una negociación colectiva, el pliego no es para decir que lo aprobamos todo, es para ver si la institución está en capacidad de conceder y de cumplir, resulta que la mayoría de solicitudes están contempladas en las normas, entonces por qué concederlas cuando ya están previstas. Las peticiones valen 1300 millones de pesos, el presupuesto de la institución por concepto de matrículas es de 18.347 millones de pesos, ¿cuánto representan los 1.300 millones en ese rubro?, lo que significaría aumentarle a los estudiantes el 10% del valor de la matrícula, eso sí afecta el bolsillo de los padres de familia y a los profesores eso no les importa. ¿Cómo puede un rector o una administración conceder esto?, es imposible, eso no tiene lógica.
Por: Willian Camilo Cardoso Manchola
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